Movimientos voluntarios e involuntarios
Los movimientos voluntarios e involuntarios son las acciones voluntarias o involuntarias que realiza el ser humano.
Los movimientos o respuestas voluntarias se dan bajo un control consciente. Un ejemplo de esta respuesta sería caminar o levantarse de la cama. Por otro lado, los movimientos o respuestas involuntarias no requieren de atención consciente, como los latidos del corazón.
Existen dos tipos de movimientos involuntarios: autónomos y de reflejo. Las respuestas autónomas regulan el organismo. Los reflejos afectan principalmente a aquellos músculos que normalmente están bajo control voluntario.

Los movimientos voluntarios son la expresión del pensamiento a través de la acción. La planificación se da en la corteza motora, se envían señales a la corteza motora, de esta a la médula espinal y finalmente a las extremidades para realizar los movimientos.
